La asociación de vecinos El Santiscal, celebraba el pasado fin de semana su tradicional velada, y lo hacía con una programación en la que la participación y disfrute de los vecinos eran evidentes.
El sábado por la noche, los protagonistas fueron (sin ellos saberlo, hasta el mismo momento), dos vecinos de la barriada, Lorenzo Hierro, más conocido como El Raspa y Manuela Guerrero.
El primero por facilitar a los vecinos las compras, ya que hace 22 años abrió una pequeña tienda conocida como la tienda del Raspa, negocio en la actualidad que regenta sus hijos. Y Manuela, una de las primeras vecinas junto a su familia en irse a vivir al Santiscal, pese a lo que la propia Manuela decía, hace ahora 36 años, (donde solo había lagartijas), está claro que el Santiscal ha cambiado mucho, para mejor, claro.